Primera Semana

Ha sido una semana muy dura, sobretodo porque inicié el doctorado, con clases de 9 de la mañana a 20 horas, con el corazón destrozado y la mente sin tregua un minuto de pensar en ti...

Algo sirvió para no comer y dar rienda suelta a mi proposito...

Cuando mis ojos dejaron por fin de llorar se fijaron en mi cuerpo maltrecho y me prometí mejorarlo, pero que dura se hace la tarea, cuando ya no son los ojos sino mi alma la que llora sin cansancio...

Miro un foto de la tonta y gorda ingenua que fuí y la grabo allí donde duele para recordarme todos los días a aquella que nunca más volveré a ser, porque intento convencerme a mi misma que querer es poder y que aún debo creer en mis sueños... esos sueños que parecen haberse destrozado en un segundo quebrando mi alma para siempre...

Siempre hice sólo lo que que quice, con la firme convicción de que un segundo nunca más se vuelve a repetir y que si dejo algo por hacer nunca volveré a tener una segunda oportunidad de repetirlo...

Hoy sigo pensando esto con más conviccion que nunca, arrepentida de no haber sido la que él esperaba y sabiendo que ya nunca tendré de nuevo esa oportunidad...

Porque la vida se acaba en un segundo y la suya casi me la arrebata un poste del alumbrado eléctrico...

Y lo peor es que hubiese preferido eso a saber que ya no me amas...

Tengo rabia y tengo pena ... tengo tanto dolor aquí guardado...